Obligada... ¡qué suerte tengo!

Sí, es una obligación pero... es una obligación maravillosa... porque además me obligo yo. Es diferente si los demás nos obligan..si soy yo la que me impongo algo y lo cumplo, me siento genial.

Así que todas las mañanas tengo que llenar con algo la página en blanco. Pero porque a no ser que me apetezca desahogarme con algo concreto...en realidad... busco la alegría del día a día.

Ayer lo hablaba con una amiga... mientras los niños son pequeños... la vida da para poco. Trabajar y al salir...la niña manda: en vez de un café con gente, dar un paseo con lluvia o con frío (en mi tierra si la lluvia o el frío te echan para atrás... dedícate a hibernar, como los osos) ir de tiendas o al cine (cosas que hacía antes de tener a mi hija). Pues todo esto se acabó... para qué la voy a meter en en una cafetería con el humo? (su madre es una chimenea pero.. ), de tiendas?? calla, calla..que me marea porque se aburre...y, claro, una cosa es que yo de un paseo bajo la lluvia..y otra calar a mi nena!! así que...

Con el blog.. puedo "hablar", escuchar, tener conversaciones...así que...bendita obligación!!!

Con los comentarios me pasa un poco lo mismo... me gusta que me comenten...y creo que a todo el mundo... así como tengo unos habituales que me comentan (de los que se echa de menos cuando no lo hacen).. tengo unos blogs habituales a los que me comento... otros blogs que no comenté nunca en mi vida pero que leo siempre y desde hace mucho... y algún blog que leo siempre y de vez en cuando comento.

A veces sí me pasa que no sé que decir...o que tengo "miedo" a ser inapropiada .... o cómo leí una vez en un comentario "no te había comentado antes porque no me siento a la altura de los comentarios que sueles tener".. cuando leí eso, me di cuenta de lo idiotas que somos a veces..y, desde entonces, no tengo ese "miedo"... si es lo que quiero decir, lo digo y ya está...

Me pasa con X, por ejemplo, normalmente no le contesto el día que publica..sino que espero un poco...pero porque leo sus relatos más de una vez... y después, con las ideas claras, dejo un comentario.

Así que, sí, me siento obligada a escribir y a comentar pero... me hace sentir de maravilla.

(contestación a las preguntas: Has pensado a veces que se ha vuelto una obligación, ¿cuándo? y ¿Comentas por obligación?

las piernas de la amada son fraternas

cuando se abren buscando el infinito

y apelan al futuro como un rito

que las hace más dulces y más tiernas

de "Piernas", La vida, ese paréntesis (1998)